Islas de ensueño
Entre océanos celestiales
navego en mi canoa,
por rutas cósmicas,
centellantes, fugaces…
Conducen a lugares
de belleza inimaginable…
unas islas vírgenes,
paraísos ideales,
un archipiélago clemente
que blanquea la mente…
Si estás en el mar
o si estás en el cielo,
no distingues el comienzo
ni de uno ni del otro…
Es como el punto de fusión
entre ambos reinos…
donde todo es eterno,
de aire placentero…
Los arrecifes de coral,
sus colores, sus matices…
Un arco iris marino
o un prisma celestial
que refleja la luz
en siete espectros diferentes
para pintar estas aguas
de vida pura, etérea…
Sus playas de blanca seda
apaciguan el corazón…
Tan sólo tocar la arena
te esboza una sonrisa;
es polvo estelar
que te anima…
El sonido de las olas
es un coro, es un eco
que resuena en tu pecho,
que te calma por dentro
que te brinda sustento…
Pero lo más lindo de allí
es ver el amanecer…
Como ese sol rubí,
ese “fénix” naciente,
separa los reinos
por unos instantes
y penetra los mismos
con plumas destellantes,
para iluminar a esta virgen
de hermoso semblante…
Estas cosas sólo pasan
en las islas de ensueño,
las que se encuentran
en el mar del cielo…
nay912
Kagaya refleja mucho lo que quiero expresar…
cuando el fénix naciente separa los reinos…